3 billones más para fondos de emergencia: El senado apoya el control militar de la frontera
La enmienda específicamente llama al “establecimiento del control operativo sobre todas las fronteras de EUA,” al norte y al sur, enfocandosé más a la frontera con México. Los fondos se pueden usar para la frontera con Canadá. Financía el muro de 700 millas, conocido por causar mas muertes a lo largo de la frontera con México y rechazado ampliamente en ambos lados de la frontera. El muro, adicional a las mallas, barreras de concreto y bardas, incluye muchos aviones (UAV) y sensores de tierra. Mientras que los aviones supuestamente van a “patrullar” la frontera, no hay nada en la ley que prevenga que van a ser usados para atacar seres humanos. Esos aviones son usados muy frecuentemente en Irak y en otros lados para asesinatos dirijidos, así como para el espionaje.
La enmienda incluye más camas para campos de detenidos, adicionales a las 20,000 que ya han sido pagadas.´También -incrementa las capacidades de la policía para detener arbitrariamente a los inmigrantes y deportarlos, sin juicio, por faltas migratorias menores.
La enmienda esta diseñada específicamente para fortalecer las acciones del gobierno federal y los militares para forzar a la policía local a aplicar las leyes de inmigración. En el presente, la ley de inmigración y su aplicación cae exclusivamente bajo la jurisdicción federal, no estatal ni local. Esforzandose par involucrar a los gobiernos estatales y locales, el gobierno federal ha establecido varios programas, incluyendo el entrenamiento de policia estatal y local. La enmienda da más fondos a las policías estatales y locales para éste “entrenamiento” federal.
Los trabajadores y las comunidades a lo largo del país han experimentado ya los resultados de éste entrenamiento en operaciones “conjuntas” con la migra (ICE) y el FBI en los centros de trabajo en varias comunidades de inmigrantes. Varios casos recientes, como pasó en Nueva York y Texas, muestran claramente que las agencias federales están envueltas en redadas masivas y castigos colectivos que incluyen detenciones ilegales y deportaciones, y están forzando a las agencias locales a involucrarse con ellos en ésta actividad ilegal. Algúnos de ellos, tales como la policía del condado en Long Island, Nueva York y la policía de la ciudad en Fort Worth Texas, se están negando a participar.